Por DENNIS WASZAK Jr.
Russell Wilson se adelantó en crear lazos con sus nuevos compañeros de los Giants de Nueva York en las últimas semanas durante algunos entrenamientos informales bajo el sol y el calor de San Diego y Atlanta.
El veterano quarterback lanzó pases a varios de sus receptores y alas cerradas durante el día y compartió historias e intercambió bromas durante la cena por la noche.
“Pasar tiempo cuando no hay nadie mirando, esos momentos, esas relaciones, ir a cenar, hablar, charlar, esa unión de equipo lo es todo”, afirmó Wilson durante una llamada de Zoom el lunes. “Simplemente hace clic en el campo de esa manera. Creo que simplemente hace que todo sea fluido y que la transición sea buena”.
Y ahora, el trabajo real comenzó en las instalaciones de los Giants.
Wilson y sus compañeros se presentaron el lunes para el inicio de los entrenamientos de temporada baja, donde el entrenador Brian Daboll se dirigió a todo el equipo y presentó a los nuevos jugadores. Wilson es uno, por supuesto. Y también lo es el quarterback Jameis Winston, ambos de los cuales Daboll hizo hablar con la ofensiva en la primera reunión oficial del equipo.
Daboll, cuyos Giants vienen de una desastrosa temporada de 3-14 y tienen la tercera selección general en la primera noche del draft de la NFL el jueves, quería que Wilson y Winston hablaran sobre sus trayectorias y lo que es importante para ellos en el fútbol americano.
“Es realmente temprano en el proceso, pero entienden lo que es el liderazgo”, comentó Daboll. “Lo han hecho en varios lugares. Espero que lo hagan aquí”.
Wilson reconoció esto el mes pasado poco después de firmar un contrato de un año con Nueva York por un valor de hasta 21 millones de dólares con 10,5 millones garantizados. Los Giants son su cuarto equipo en cinco años, pero el jugador de 36 años tiene el tipo de experiencia y liderazgo que la franquicia ha necesitado desesperadamente.
“Estoy emocionado de estar con estos chicos”, expresó Wilson. “Estoy emocionado de tener la oportunidad de jugar y ser un Giant. Qué oportunidad es esta. Podemos hacer que sea realmente especial”.
Wilson, ha sido elegido al Pro Bowl en 10 ocasiones y tiene un anillo de Super Bowl de su tiempo en Seattle; ayudó a Pittsburgh a llegar a los playoffs la temporada pasada, cuando lanzó para 2.482 yardas con 16 pases de touchdown y cinco intercepciones y un índice de pasador de 96,5. Pero los Steelers perdieron cinco seguidos al final de la temporada después de comenzar 6-1 con él. Y Pittsburgh luego perdió en la ronda de comodines ante Baltimore.
Los Steelers permitieron que Wilson se convirtiera en agente libre y terminó llegando a un equipo de los Giants que parece estar en una encrucijada. Tanto Daboll como el gerente general Joe Schoen están bajo presión y el copropietario John Mara dejó claro después de la temporada que espera una mejora notable en todos los aspectos.
Wilson también está abrazando la vida en el área de Nueva York, encontrando su camino hacia el Madison Square Garden junto con su esposa Ciara para ver a los Knicks derrotar a los Pistons de Detroit 123-112 en el primer juego de su serie de playoffs el sábado por la noche.