Associated Press
LIMA (AP) — Perú evalúa mecanismos de cooperación bilateral para enviar a prisiones en El Salvador a reclusos extranjeros considerados muy peligrosos, dijo el jueves el primer ministro Eduardo Arana.
“El crimen organizado transnacional exige respuestas firmes y coordinadas. Por ello, el gobierno ha evaluado mecanismos de cooperación bilateral para traslado de internos extranjeros de alta peligrosidad a sus países de origen, incluyendo centros especializados como el CECOT en El Salvador”, dijo Arana en una presentación ante el Congreso, en referencia al Centro de Confinamiento del Terrorismo.
Esa prisión de máxima seguridad fue construida por el gobierno Nayib Bukele en su política de mano dura contra las pandillas.
Allí han sido enviados más de 200 migrantes venezolanos deportados desde Estados Unidos tras el regreso a la Casa Blanca de Donald Trump. Estados Unidos firmó un acuerdo con El Salvador para que el país centroamericano recibiera en su sistema penitenciario a reclusos del vecino del norte a cambio de un pago.
El primer ministro peruano no brindó detalles de que se haya llegado a un acuerdo similar con El Salvador o con otros países de la región para para devolver a los reos a cárceles de sus países de origen.
La AP pidió más información a la oficina del primer ministro, sin obtener una respuesta al momento.
Los presos venezolanos son los más numerosos en Perú (3.995) seguidos de colombianos (780), ecuatorianos (161), mexicanos (84) y bolivianos (70) entre otros, según datos oficiales de marzo.
La medida, según Arana, “busca descongestionar los penales temporalmente, desarticular redes criminales que operan desde el penal y reafirmar el principio de autoridad”.
Arana afirmó que buscan financiamiento de bancos de desarrollo para construir más cárceles en el país sudamericano.
Perú tiene 69 cárceles donde habitan casi 101.302 reos pese a que su capacidad es para 41.764, con una superpoblación de 143%, según datos oficiales de marzo.