NUEVA YORK — Es un éxito pop como muchos otros: con un estribillo ascendente, una tonada adictiva y un ritmo cálido. Pero “OMG”, interpretada por el pelotero de cuadro José Iglesias, se ha convertido en el himno perfecto para el inesperado desempeño de los Mets en los playoffs.
Desde su lanzamiento en las plataformas de “streaming” a finales de junio, “OMG” se ha convertido en un éxito para un equipo de los Nueva York con una vibra divertida que los jugadores muestran dentro y fuera del terreno.
“OMG”, la mayoría de cuya letra está en español, es omnipresente en el Citi Field, y al mismo tiempo había generado más de 2 millones de transmisiones de audio y video bajo demanda en Estados Unidos hasta el 10 de octubre, según la empresa de análisis y datos musicales Luminate.
En YouTube, el vídeo oficial de la canción tiene casi 4,5 millones de visitas.
El miércoles, cuando los Mets regresan a casa para reanudar la Serie de Campeonato de la Liga Nacional contra los Dodgers de Los Ángeles, “OMG” puede seguir aumentando su popularidad: el viernes, la superestrella Pitbull compartió un remix de la canción junto al cantante colombiano Silvestre Dangond.
He aquí cómo un pelotero cuya carrera parecía cerca del fin, conectó un jonrón con una canción.
El género de ‘OMG’ podría identificarse como pop latino contemporáneo, que incorpora elementos de reggaetón y música tropical. Se trata de sonidos pop que se escuchan en toda América Latina y Estados Unidos, dice el periodista y crítico musical Gary Suarez, autor del boletín Cabbages.
“Como canción, es música pop pura y positiva”, dice. “Es una celebración de las cosas buenas por encima de la adversidad, lo cual se siente muy bien para una canción de béisbol”.
Por ejemplo, la letra dice: “No tengo nada pero soy feliz”.
Su coro bilingüe también permite que “OMG” atraiga a un público más amplio. ”Oh my God! Dame salud y prosperidad”, canta Iglesias, cubano de 34 años, nacido en Cuba.
Para algunas comunidades, una canción como esta había tardado mucho en llegar.
“Hay muchos dominicanos, puertorriqueños y cubanos jugando béisbol en este momento. Y los Mets, por supuesto, no son una excepción. Y entonces, creo que había cierta necesidad de que una canción como ésta surgiera de este mundo y lo reflejara”, dice Suárez.
En cuanto al remix de Pitbull, Suárez señala que la canción fue escrita cerca de Miami, la zona de influencia de ese artista de raíces cubanas.
“Es una estrella pop omnipresente que le da mayor atractivo a esto, especialmente en un momento en que los Mets están en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional”, dice. “No hace daño tener alguna estrella detrás. Y tal vez eso ayude a dar a esto una vida más larga, más allá del final de la temporada de los Mets”.
Si bien se sabe que Pitbull es fanático de los Marlins (incluso una vez grabó el tema “Marlins Time to Represent”), dijo a The Associated Press en un comunicado que, como cubanoestadounidense, se identificaba con Iglesias “debido a nuestra cultura compartida”.
La nueva canción “trata sobre ser alguien en quien pocos confían y la positividad que la convierte en la combinación perfecta”, dijo Pitbull.
Cómo José Iglesias se convirtió en “Candelita”
Iglesias irrumpió en las Grandes Ligas con los Medias Rojas de Boston en mayo de 2011, cuando tenía 21 años. Ganó el premio al Novato del Año de la Liga Americana en 2013 y fue elegido al Juego de Estrellas con Detroit en 2015.
Los Mets son su séptimo equipo en 12 temporadas en las Grandes Ligas y ha ganado casi 40 millones de dólares en salario.
Pero para 2023, su futuro en la MLB estaba, en el mejor de los casos, nublado. Pasó toda la temporada en las ligas menores.
Fue entonces cuando comenzó a lanzar canciones de pop latino bajo el apodo de Candelita, comenzando con “Tambor” y “Cantinero”. A principios de este año, lanzó una colaboración con el cantante cubano Lenier, “No Voy a Volver”, así como algunos otros temas en solitario: “Te Lo Advertí” y “Perdóname Padre”.
Sin embargo, nada ha sonado como “OMG”. Iglesias lo escribió y grabó en el receso previo a esta campaña, en su casa en una finca cercana a Miami, mientras también se preparaba para unirse a los Mets con un contrato de ligas menores.
Comenzó la temporada en la Triple A, pero las lesiones en el plantel de los Mets le abrieron un lugar en Queens. El 31 de mayo, cuando jugó su primer duelo con Nueva York, “OMG” fue la canción con la que se le presentó cuando llegaba a la caja de bateo.
Rápidamente emergió como una chispa para los Mets, se ganó más tiempo de juego y su canción se convirtió en un grito de guerra para el equipo.
Iglesias interpretó “OMG” en directo por primera vez a fines de junio, después de que los Mets vencieron a los Astros de Houston en el Citi Field. Desde entonces se ha convertido en un himno no sólo para el equipo, sino también para los fanáticos.
“OMG” debutó en el primer puesto de las ventas de canciones digitales latinas de Billboard en julio. Vendió más de 1.000 descargas en su primera semana.
El vídeo oficial muestra a empleados que bailan (un trabajador de Amazon, un mecánico, un cocinero) y termina con una fiesta al aire libre.
“Es difícil decir cómo me siento”, dijo Iglesias después de esa actuación en el estadio. “Eso fue un gran problema. Cantar frente a grandes fanáticos y ver a mis compañeros corriendo allí es simplemente un sueño hecho realidad”.
Ahora, la canción suena después de cada jonrón de los Mets en el Citi Field y luego de cada victoria. Después de los vuelacercas, los jugadores sonrientes posan en el dugout para fotos grupales sosteniendo un cartel que dice “OMG” en azul y naranja, los colores del equipo.
La canción también suena en la casa club de los Mets, donde han disfrutado de tres celebraciones con champaña en las últimas tres semanas, primero por asegurar un lugar en los playoffs y luego dos veces por avanzar.
¿Hay otros peloteros que sean músicos?
La música es inseparable de la experiencia del estadio, desde las canciones de los jugadores hasta las interpretaciones en la octava entrada de temas como “Piano Man” o “Mr. Brightside” en Citi Field. Por lo tanto, no debería sorprender que algunos jugadores entren al estudio.
Tampoco es totalmente raro que tengan algún éxito en las listas de popularidad: el disco de R&B-rap de 1994 del astro del béisbol y el fútbol Deion Sanders, “Prime Time”, alcanzó el 14to puesto en la lista de álbumes Heatseekers de Billboard y el 70mo lugar en el Top R&B/Hip-Hop de álbumes.
El álbum debut del expelotero boricua de los Yankees Bernie Williams, “The Journey Within” de 2003, alcanzó el tercer sitio en la lista de discos de jazz.
¿Quién podría remezclar ‘OMG’ a continuación?
No faltan seguidores de los músicos de los Mets: Nas ha mencionado el nombre del equipo varias veces. Ad-Rock y MCA de los Beastie Boys fueron fanáticos notables. Se dice que Nicki Minaj es una fanática, según MLB.com, ya que creció en Queens. Billy Joel fue el último en ofrecer un recital en el histórico Shea Stadium de los Mets antes de su demolición.
No se sabe si Grimace está considerando una carrera musical, pero las posibilidades son infinitas.
El periodista de béisbol de la AP Mike Fitzpatrick contribuyó con este despacho