La contratación en Estados Unidos aumentó inesperadamente en diciembre, ya que los empleadores agregaron 256.000 empleos, otra señal de la resiliencia de la economía frente a las altas tasas de interés.
El crecimiento del empleo aumentó 212.000 el mes pasado con respecto a noviembre, informó el viernes el Departamento de Trabajo.
Durante todo 2024, la economía agregó 2,2 millones de empleos, una cifra sólida pero inferior a los 3 millones de 2023, los 4,5 millones de 2022 y el récord de 6,4 millones en 2021, mientras la economía se recuperaba de los despidos masivos de la pandemia.
Las cifras mensuales superaron las expectativas de los pronosticadores de alrededor de 155.000 nuevos empleos y un desempleo de 4,2%. Las empresas de atención médica agregaron 46.000 empleos, los minoristas 43.000, y las agencias gubernamentales federales, estatales y locales 33.000. Pero los fabricantes recortaron 13.000 empleos.
Las revisiones del Departamento de Trabajo eliminaron 8.000 empleos de las nóminas de octubre y noviembre.
Los salarios por hora promedio aumentaron 0,3% desde noviembre y 3,9% respecto al año anterior. El aumento salarial anual fue ligeramente menor de lo que los economistas habían pronosticado.
Las acciones cayeron la mañana del viernes ante las expectativas de que el sólido informe sobre el empleo redujera la probabilidad de que la Reserva Federal disminuya las tasas de interés. La economía parece no necesitar ayuda. “Parece bastante seguro que el ritmo de los recortes de tasas de la Fed va a disminuir”, dijo Brian Coulton, economista en jefe de Fitch Ratings.
No ha sido fácil obtener una visión clara del mercado laboral de Estados Unidos en los últimos meses.
Los huracanes y una importante huelga en Boeing alteraron las cifras de empleo de octubre, impulsándolas a la baja y preparando el terreno para un rebote compensatorio en noviembre, que probablemente exageró la fortaleza de la contratación.
Thomas Simons, economista en jefe de Estados Unidos en Jefferies, dijo que los ajustes estacionales que rodean la temporada de fiestas podrían haber afectado las cifras de diciembre, pero agregó que, no obstante, “es difícil decir algo negativo sobre los detalles de este informe”.
En los últimos años, la economía y el mercado laboral han mostrado una sorprendente resiliencia. En respuesta a la inflación que alcanzó un máximo de cuatro décadas hace dos años y medio, la Fed elevó su tasa de interés de referencia, la tasa de fondos federales, 11 veces entre 2022 y 2023, llevándola a su nivel más alto en más de dos décadas.
Muchas personas esperaban que los mayores costos de endeudamiento causaran una recesión, pero no fue así. Las empresas siguieron contratando, los consumidores siguieron gastando y la economía siguió avanzando. De hecho, el producto interno bruto de Estados Unidos, que es la producción nacional de bienes y servicios, se ha expandido a un robusto ritmo anual de 3% o más en cuatro de los últimos cinco trimestres.
Los trabajadores estadounidenses disfrutan de una inusual seguridad laboral. Los despidos están por debajo de la tendencia previa a la pandemia. El jueves, el Departamento de Trabajo informó que solo 211.000 personas solicitaron prestaciones del seguro por desempleo la semana pasada, la cifra más baja en casi un año.
La inflación también ha disminuido, desde un pico de 9,1% en junio de 2022 hasta 2,7% en noviembre. La caída en los aumentos interanuales de precios le dio a la Fed la suficiente confianza para reducir las tasas tres veces en los últimos cuatro meses de 2024.
Pero los funcionarios de la Fed señalaron en su reunión de diciembre que planeaban ser más cautelosos con los recortes de tasas este año. Ahora proyectan solo dos reducciones de tasas en 2025, frente a las cuatro que preveían en septiembre. El progreso contra la inflación se ha estancado en los últimos meses y sigue estando por encima del objetivo de la Fed de 2%.