Por GEOFF MULVIHILL
El Mes del Orgullo comienza este fin de semana con eventos en distintas partes del mundo.
Es una serie anual de desfiles y otras reuniones para celebrar la cultura y los derechos de la comunidad LGBTQ+.
El Orgullo es, en su esencia, una celebración y una protesta.
En Estados Unidos este año, eso significa levantar la voz contra una serie de políticas que imponen restricciones a las personas transgénero y que intentan poner fin a los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI por sus iniciales en inglés) a nivel de gobierno, educación y empresarial.
A continuación, un vistazo a sus raíces y a los eventos y temáticas de este año.
Cuándo comenzó el Mes del Orgullo
La celebración global de un mes comenzó con la Semana del Orgullo Gay a finales de junio de 1970, un año después de que se efectuó una violenta redada policial en el Stonewall Inn de Nueva York, un bar gay.
En una época en que muchas de las personas LGBTQ+ mantenían sus identidades en privado, la redada del 28 de junio de 1969 provocó una serie de protestas públicas y fue un catalizador del movimiento por los derechos de los homosexuales.
La primera semana del orgullo incluyó marchas en Chicago, Los Ángeles, Nueva York y San Francisco, y desde entonces se ha expandido a otras ciudades. En el calendario hay eventos para este fin de semana en Filadelfia; Nueva Orleans el 14 de junio; Chicago el 21 y 22 de junio; y Nueva York durante el fin de semana del 28 y 29 de junio. También se planean muchos otros eventos distintas localidades del país.
Hay celebraciones del orgullo en todo el mundo, incluyendo en Tokio el 8 de junio; Toronto del 27 al 29 de junio; Sao Paulo el 22 de junio; y París el 28 de junio.
Algunos eventos también se realizan en otros meses. World Pride, un evento bienal que se celebra este año en Washington, D.C., comenzó en mayo y se extiende hasta el 8 de junio. En Londres se celebra en julio; en Río de Janeiro se lleva a cabo una gran celebración en noviembre y en Atlanta una en octubre.
El expresidente Bill Clinton proclamó en 1999 a junio como el Mes del Orgullo Gay y Lésbico, la primera vez que lo hacía un mandatario de Estados Unidos.
Trump apunta a personas trans y las políticas de DEI
Cuando el presidente Donald Trump regresó a la Casa Blanca cargo en enero pasado, rápidamente trató de revertir los derechos de la comunidad LGBTQ+.
Ha apuntado en particular a las personas transgénero con políticas que pusieron fin a las medidas que le permitían a las personas cambiar el sexo que aparece en su pasaporte, eliminó la participación de personas trans en las fuerzas armadas y trato de frenar el uso de programas de seguro federal para cubrir gastos de atención afirmativa de género para menores de 19 años, y mantener a deportistas transgénero fuera de las competiciones deportivas femeninas.
Todos esos cambios enfrentan desafíos en los tribunales.
Sus acciones siguen a varios años de políticas en estados de gobierno republicano que prohíben la atención afirmativa de género para menores de edad y establecen las disciplinas deportivas en las que pueden participar las personas transgénero y qué baños escolares y públicos pueden usar. Se tiene previsto que la Corte Suprema federal emita este mes un fallo para determinar la constitucionalidad de la prohibición al tratamiento médico en Tennessee.
Una de las órdenes de Trump pedía eliminar de las publicaciones y sitios web del gobierno todas las referencias a lo que él y algunos otros conservadores llaman “ideología de género”.
Como resultado: Se han eliminado referencias a personas transgénero de los sitios web del gobierno, incluido el del Monumento Nacional de Stonewall, lugar del evento que inspiró el Orgullo.
Aproximadamente la mitad de los adultos en Estados Unidos aprueba el manejo de Trump a los temas transgénero, según una encuesta del Centro de Investigación de Asuntos Públicos de AP-NORC realizada el mes pasado. Alrededor del 40% de los votantes aprueba su presidencia en términos generales.
Pero el apoyo a sus políticas individuales sobre personas transgénero no es uniforme, y hay un consenso más marcado en contra de las políticas que afectan a los jóvenes.
Las celebraciones de este año en Estados Unidos
Los organizadores del PrideFest de Milwaukee están preparados para recibir a cerca de 50.000 personas para su evento programado del 5 al 7 de junio.
“Sentimos que la gente se presentará, y esa es su protesta”, declaró Wes Shaver, presidente y director general de Milwaukee Pride Inc.
El tema del evento es “Celebrando el Poder del Orgullo” y, por primera vez, uno de los escenarios de entretenimiento contará por una noche exclusivamente con artistas transgénero. Shaver dijo se trataba de un movimiento intencional en respuesta a las políticas de Trump. Otra noche, el escenario contará únicamente con artistas de color.
Jeremy Williams, productor ejecutivo de Philly Pride 365 en Filadelfia, dijo que en no esperaba protestas adicionales en la ciudad de lo que han habido en otros años.
“Todos están allí para estar juntos”, comentó.
10mo aniversario de la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo a nivel nacional
Un hito que probablemente será celebrado: Este mes se conmemora el décimo aniversario del fallo Obergefell vs. Hodges de la Corte Suprema federal, con el que se reconoció el matrimonio entre personas del mismo sexo a nivel nacional. Fue un evento decisivo en el establecimiento de derechos para las personas LGBTQ+ en todo el país.
Alrededor de dos terceras partes de los adultos LGBTQ+ en Estados Unidos dijeron que el caso hizo que el país tuviera una mayor aceptación a las parejas del mismo sexo, según una encuesta del Pew Research Center publicada la semana pasada.
Sin embargo, la encuesta reveló que las personas LGBTQ+ no siempre se sienten aceptadas. Cerca de seis de cada 10 dijeron que ven “una gran cantidad” o “una cantidad justa” de aceptación social para quienes son lesbianas, gays o bisexuales. Pero únicamente alrededor del 10% dijo se aplica lo mismo para las personas no binarias y transgénero.
Qué empresas han retirado o reducido patrocinios
Varias grandes empresas han reducido su patrocinio para los eventos del Orgullo este año.
Anheuser-Busch, la cervecera con sede en San Luis, se negó a patrocinar el PrideFest de la ciudad después de haber otorgado su apoyo durante tres décadas, dejando a los organizadores con un déficit de 150.000 dólares en comparación con el presupuesto del año pasado, dijeron a The Associated Press.
NYC Pride dijo que alrededor del 20% de sus patrocinadores corporativos se retiraron o redujeron su apoyo, incluidos PepsiCo y Nissan. La automotriz señaló que estaba revisando todos sus costos de publicidad.
En otras ciudades, como Kansas City, Missouri, los eventos del orgullo perdieron alrededor de la mitad de sus presupuestos.
Varias empresas que han retirado su patrocinio no han explicado su decisión a The Associated Press. Pero algunos expertos ven el cambio como parte de un retiro más amplio del activismo de marca.
Aun así, los grupos responsables de muchos de los eventos del Orgullo dicen que algunas empresas han seguido contribuyendo, aunque han pedido que no sean mencionadas públicamente como patrocinadores.
___
Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.