Por The Associated Press
Los incendios forestales provocaron evacuaciones obligatorias en un condado de Carolina del Norte mientras los equipos de emergencia combatían incendios separados en una zona del estado que aún no se ha recuperado del huracán Helene, mientras que el gobernador de Carolina del Sur declaró una emergencia en respuesta a un creciente incendio forestal.
El Departamento de Seguridad Pública de Carolina del Norte anunció una evacuación obligatoria a partir de las 8:20 de la tarde del sábado para partes del condado Polk, donde los fuegos más grandes abarcaban entre 445 y 502 hectáreas (1.100 y 1.240 acres). Había otros dos en los condados cercanos Burke y Madison, y uno en el condado Stokes, en la frontera norte con Virginia.
En Carolina del Sur, el gobernador, Henry McMaster, declaró el estado de emergencia el sábado dentro de los esfuerzos para detener el incendio de Table Rock en el condado Pickens, que comenzó el día anterior en las montañas Blue Ridge.
“A medida que este incendio forestal continúa extendiéndose, el estado de emergencia nos permite movilizar recursos rápidamente y asegurar que nuestros bomberos tengan el apoyo que necesitan para proteger vidas y propiedades”, dijo McMaster en un comunicado que reforzó una prohibición estatal de quemas al aire libre emitida el viernes por la Comisión Forestal de Carolina del Sur.
Los responsables locales de bomberos pidieron evacuaciones voluntarias el sábado de algunos residentes cerca de la montaña Table Rock, dijo la comisión forestal en una publicación en redes sociales.
La policía del Condado Pickens publicó una actualización la tarde del sábado diciendo que los equipos habían cesado las operaciones y reanudarían el trabajo el domingo por la mañana con personal de tierra y maquinaria y asistencia de helicópteros y aviones cisterna. El incendio abarcaba unas 44,5 hectáreas (110 acres) y se pidió al público que evitara la carretera estatal 11.
La región occidental de Carolina del Norte fue gravemente afectada por el huracán Helene en septiembre. Entre los daños extensos, las inundaciones arrasaron más de 1,6 km (una milla) de carriles en dirección este en la Interestatal 40 que conduce al este de Tennessee, que permaneció parcialmente cerrada al tráfico hasta marzo.
El huracán dañó o afectó a 8.046 kilómetros (5.000 millas) de carreteras mantenidas por el estado y dañó 7.000 carreteras privadas, puentes y alcantarillas en Carolina del Norte.