La filantropía busca fortalecer la confianza de la generación Z en las instituciones

Por JAMES POLLARD

NUEVA YORK (AP) — Quizás su perspectiva se desarrolló cuando la propagación descontrolada del COVID-19 trastocó casi todas las facetas de sus jóvenes vidas. Tal vez se endureció a medida que los peores daños provocados por el cambio climático se hicieron más probables pese a las advertencias contundentes de los científicos. O es posible que la actitud se haya formado a partir de sus recuerdos de infancia a raíz del impacto que la crisis financiera mundial tuvo en sus familias.

Sea cual sea la razón, está bien documentado que la generación Z tiende a desconfiar de las instituciones más importantes sobre salvaguardar su futuro, en comparación con las generaciones anteriores.

Aproximadamente 1 de cada 10 personas menores de 30 años tenía “mucha confianza” en quienes dirigían la Corte Suprema de Estados Unidos, según una encuesta de junio de 2024 de The Associated Press y el NORC Center for Public Affairs Research, una organización apartidista de investigación. Una encuesta de mayo de 2023 reveló que el 44 % de los adultos menores de 30 años tenía “casi absoluta falta de confianza” en quienes dirigían bancos e instituciones financieras, aproximadamente el doble que los adultos de 60 años o más que opinaban lo mismo.

La brecha se extiende a otros comportamientos. Una encuesta del AP-NORC realizada en marzo reveló que solo una cuarta parte de los adultos menores de 30 años habían dedicado su tiempo a obras benéficas durante el último año o habían brindado apoyo no financiero a personas de su comunidad, en comparación con el 36 % de los mayores de 60 años. Los adultos más jóvenes también eran más propensos que los adultos mayores a responder que ellos o su hogar no donaban nada de dinero a obras benéficas, según la encuesta.

El sector filantrópico ya trabaja para revertir esta desilusión al empoderar a la generación Z para que logre el cambio estructural que con frecuencia desea. A partir de la idea de que los jóvenes desconfían de las instituciones porque no se sienten atendidos ni incluidos, se llevan a cabo varias iniciativas con la esperanza de que las instituciones más receptivas sean consideradas como más legítimas. Quizá los más optimistas crean que su energía puede dar vida a alternativas al statu quo, si tan solo les dieran roles significativos.

“Los jóvenes no solo somos víctimas de estos sistemas. Tenemos iniciativa y tenemos poder”, dijo Summer Dean, de 27 años, quien desglosa temas ambientales complejos en información práctica para sus 116.000 seguidores en Instagram, @climatediva.

“Si quieren inspirarnos, inclúyannos de verdad en las sólidas estructuras de su organización”, agregó.

Hacer algo no es hacer lo que sea

Cuando DeNora Getachew asumió el cargo como directora general de DoSomething (HazAlgo), en abril de 2021, durante la pandemia, reconoció que la plataforma ofrecía una buena cantidad de oportunidades de “flojactivismo” —formas que requerían poco esfuerzo para apoyar en línea causas sociales—. DoSomething no satisfacía los deseos de su público de 13 a 25 años de provocar un cambio comunitario más duradero.

La organización sin fines de lucro fue fundada en 1993 para impulsar el voluntariado juvenil. Pero Getachew dijo que el “nuevo DoSomething” considera el voluntariado como un “peldaño más en la escalera”, no como “el peldaño más alto”.

Ella destacó un nuevo programa llamado Talking Trash (Hablar de Basura), que hace más que simplemente animar a los voluntarios a recolectar y reciclar botellas de plástico. Mediante campañas educativas y microsubvenciones para proyectos seleccionados, DoSomething motiva a sus miembros a reflexionar más profundamente sobre cómo mejorar la infraestructura general de la gestión de residuos de sus comunidades.

“Somos sus animadores”, expresó. “Somos quien los apoya y los ayuda a descubrir cómo aprovechar esa curiosidad, al menos inicial, sobre lo que pueden lograr”.

Katelyn Knox, expolicía de 25 años, forma parte de la legión inaugural de “basurfluencers” de DoSomething, quienes recibieron 250 dólares y apoyo de colegas para mejorar los sistemas locales de reciclaje. Tras mudarse de Florida a Los Ángeles, Knox notó que muchos vecinos no entendían las normas sobre qué es realmente reciclable. E incluso si las entendían, encontró que los contenedores de reciclaje escaseaban.

Así que diseñó una aplicación que identifica dónde van los materiales reciclables y ofrece servicios de reciclaje de casa en casa en su comunidad.

“Es muy difícil lograr un cambio. Tienes que convencer a mucha gente para realizar ese cambio —especialmente a personas mayores que tú”, dijo Knox. “No da tanto miedo al saber que otras personas están conmigo y lo hacen muy cerca de mí en sus propias ciudades”.

DoSomething reunió a Knox y a Dean para grabar un video que educa a estudiantes universitarios sobre sistemas de reciclaje deficientes.

Dean, la narradora ambiental, reportó que ha visto a muchos jóvenes responder a problemas estructurales abrumadores de una de dos maneras: o aceptan que “tendrán que aprender a sobrevivir” o “se dan cuenta de que realmente podemos imaginar un nuevo sistema de vida y de gobierno”.

“Muchos de nosotros nos sentimos impotentes en algún punto de todo esto porque, con frecuencia, estos sistemas nos hacen sentir que no hay nada que nosotros podamos hacer”, dijo. “Yo siempre le digo a la gente que se aferren a estas emociones fuertes, porque eso es lo que te impulsa a actuar y a no sentirte tanto como víctima”.

Convocatoria millonaria de emprendedor de Silicon Valley

Reid Hoffman, cofundador de LinkedIn, lanzó el The Trust in American Institutions Challenge (El Reto de la Confianza en las Instituciones Estadounidenses) el pasado diciembre junto con la aceleradora filantrópica Lever for Change (Palanca para el Cambio). La convocatoria abierta de 10 millones de dólares llevará las soluciones locales a mayor escala para restaurar la confianza pública en temas diversos, desde la educación y el gobierno hasta los medios de comunicación y la medicina.

Hoffman, un megadonante demócrata de 57 años, considera que la filantropía ofrece más oportunidades “para iniciar el proceso de confianza”. Agregó que esto se debe a que no hay conflictos de interés más allá de la misión.

El reto no se centra únicamente en los jóvenes. Hoffman explicó que “prácticamente todos” en el espectro político entero pueden reconocer los problemas de confianza de la sociedad. En su opinión, el problema no es que las instituciones no funcionen para los jóvenes. Sí funcionan, según él, y “parte de ser joven es aprender eso”. La idea, añadió, “es reconectar y revitalizar”.

“Somos como peces en el agua. No nos damos cuenta de cuán importantes son estas instituciones para nuestro entorno actual”, dijo Hoffman. “Revitalizarlas es fundamental para una sociedad que funcione”.

Una oportunidad antes del gran aniversario

Otra iniciativa conecta a representantes jóvenes con responsables de la toma de decisiones para ayudar a las instituciones cívicas a llegar a las nuevas generaciones previo al 250vo aniversario de Estados Unidos.

Al reconocer que los adolescentes y jóvenes adultos de hoy son quienes heredarán la democracia estadounidense, Youth250 (Juventud250) cede el micrófono a los jóvenes mientras el país reflexiona sobre su pasado y mira hacia el futuro. Los asesores trabajan con museos, sitios históricos y bibliotecas para centrar las perspectivas de la generación Z.

Dillon St. Bernard, el director de 25 años de la serie documental Youth250, dijo que la campaña “es sobre convertir la representación en poder”.

Hizo hincapié en la necesidad de construir coaliciones intergeneracionales. Los desafíos actuales —el cambio climático, la democracia y la justicia racial— no han sido resueltos por sus predecesores, según St. Bernard.

“Nosotros, como generación, no hemos conocido más que una casa en llamas y queremos ver cómo se vería detener ese incendio”, dijo.

____

La cobertura de The Associated Press sobre filantropía y organizaciones sin fines de lucro recibe apoyo a través de la colaboración de la AP con The Conversation US, con financiamiento de Lilly Endowment Inc. La AP es la única responsable de este contenido. Para conocer toda la cobertura filantrópica de la AP, visite https://apnews.com/hub/philanthropy

Related posts