Associated Press
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — México culpó el martes a Estados Unidos del avance del gusano barrenador al asegurar que ese país era el responsable de controlar la plaga cuando estaba al sur de Panamá y ahora no colabora para abrir una fábrica de moscas estériles necesarias para frenar la transmisión del gusano entre el ganado.
“Hemos pedido durante meses sin respuesta que se abra la planta de producción de moscas estériles en México, en el estado de Chiapas. Seguimos esperando”, dijo Julio Berdegué, secretario de Agricultura, durante la conferencia presidencial matutina diaria. “Necesitamos la colaboración técnica de los Estados Unidos, no la podemos abrir nosotros solamente”.
Estados Unidos restringió la entrada de ganado mexicano a fines de noviembre tras la detección de la plaga, levantó la medida en febrero porque se activaron protocolos para evaluar a los animales antes de su ingreso al país y el domingo suspendió las importaciones de ganado bovino mexicano durante 15 días, una decisión que el gobierno de Claudia Sheinbaum consideró “injusta”.
El gusano barrenador es una larva de la mosca Cochliomyia hominivorax que puede invadir los tejidos de cualquier animal de sangre caliente, incluidos los humanos. El parásito entra en la piel de los animales ocasionando graves daños y lesiones que pueden ser mortales.
Berdegué dijo que el problema desde noviembre fue la falta de moscas, “una especie del extinguidor que se usa para apagar este fuego”, que sólo produce Estados Unidos en Panamá. Y aunque ya volvieron a llegar estos insectos a México, se necesita producir más.
No obstante, anunció que México va “a restringir con mucha más fuerza la movilización del ganado desde el sur del país”, sin que eso conlleve cerrar la frontera con Guatemala, y que el gobierno prepara un plan para garantizar que la plaga, actualmente limitada al sur y sureste del país, no llegue al norte de la república.
De momento se hará “un barrido desde el Golfo de México hasta el Pacífico, a la altura de Veracruz, hasta llegar a Oaxaca y sur de Guerrero, visitando el 100% de los ranchos a inspeccionar”.
Berdegué confía en que después de los 15 días de paralización de las exportaciones éstas se reanuden. ”Estamos teniendo reuniones diarias con APHIS (la agencia estadounidense que controla la importación de ganado). En fin, estamos haciendo todo lo que es materialmente posible hacer” agregó.
El problema del gusano barrenador se ha intensificado en medio las nuevas políticas arancelarias de la administración de Donald Trump pero se trata de una plaga seria que cuesta cuesta mucho eliminarla. “La vez pasada tomó 50 años”, dijo. “Ahora lo vamos a hacer más rápido”.
Además, la Secretaría de Salud de México emitió este mes un aviso epidemiológico después de que el 17 de abril se confirmara el primer caso humano de miasis por gusano barrenador en una mujer de 77 años que vive en el estado sureño de Chiapas.