Por ANDREW DAMPF
ROMA (AP) — En el pasado, el entrenador de la selección italiana era alguien que tenía una larga lista de logros como técnico y estaba más cerca del final de su carrera que del comienzo.
Este no es el caso de Gennaro Gattuso.
Pero estos son tiempos desesperados para Italia. El cuatro veces campeón del mundo enfrenta la posibilidad real de perderse la Copa Mundial por tercera ocasión consecutiva.
Luciano Spalletti fue despedido después de que Italia perdió su primer partido de clasificación 3-0 contra Noruega y después de que Claudio Ranieri rechazó el trabajo, la federación italiana recurrió a Gattuso, miembro del último equipo Azzurri que ganó la Copa del Mundo en 2006.
Esperan que Gattuso, de 47 años, pueda transmitir el mismo nivel de combatividad y determinación que solía mostrar como un mediocampista aguerrido a un grupo de jugadores que han mostrado más disposición a esforzarse por los clubes que pagan sus contratos que por el equipo nacional.
No importa que Gattuso haya ganado solo un trofeo en sus 12 años de carrera como entrenador: la Copa de Italia con el Napoli hace cinco años. Porque dondequiera que ha ido, ha tenido un enfoque directo y sin filtros en una serie de clubes en crisis.
Así que es difícil imaginar a Gattuso lidiando con la negativa de Francesco Acerbi a una convocatoria de Italia para el partido contra Noruega de la misma manera que lo hizo Spalletti, principalmente restándole importancia.
Diatriba verbal en Creta
A Gattuso no le gustó la forma en que lo retrataron en los medios griegos cuando dirigía al club Creta, que tenía problemas financieros en 2014, y arremetió en una diatriba verbal durante una memorable conferencia de prensa.
“No vine aquí de vacaciones”, dijo entonces. “Un año aquí son diez años en otro club. Y esto es bueno para mí”.
Gattuso renunció, pero lo convencieron de opinión y regresar un día después.
En su siguiente trabajo con Pisa, él y su homólogo de Foggia, Roberto De Zerbi, casi llegaron a los golpes en una acalorada discusión durante una victoria en los playoffs para ganar el ascenso a la Serie B después de que Gattuso fuera golpeado en la cabeza por una botella lanzada desde las gradas.
Y solo la temporada pasada en el club croata Hajduk Split, Gattuso removió al jugador estrella Ivan Perisic del equipo por razones disciplinarias.
Enfrentándose a Beckham
Como jugador, también, Gattuso también fue combativo con los jugadores más reconocidos.
Durante el partido en el que anotó su único gol internacional, contra Inglaterra en 2000, Gattuso, de 22 años, criticó a David Beckham por supuestas simulaciones, diciéndole al famoso mediocampista directamente en la cara: “Esto no es una piscina”.
Bono de clasificación
Aunque no se anunciaron detalles financieros, trascendió que Gattuso recibió solo un contrato de un año con Italia por 800.000 euros (poco menos de un millón de dólares).
Pero el acuerdo incluye un bono de un millón de euros (1,16 millones de dólares) si Italia se clasifica para la Copa del Mundo, informaron los medios italianos.
Compañeros de 2006
Gattuso no estará solo.
El ex portero y capitán de Italia, Gianluigi Buffon, sigue siendo el director del equipo.
Leonardo Bonucci, el ex defensor que fue capitán del equipo que Gattuso entrenó en el AC Milan, será entrenador asistente.
Andrea Barzagli, otro miembro del equipo de 2006, parece estar listo para ser nombrado entrenador del equipo sub20 o sub21 de Italia.
Y Cesare Prandelli, quien llevó a Italia a la final del Campeonato Europeo de 2012, está siendo considerado para hacerse cargo del desarrollo de jóvenes talentos de la federación.
El debut de Gattuso será contra Estonia en septiembre.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.